#美联储降息 Recientemente vi un dato bastante impactante: el actual cierre del gobierno en Estados Unidos está a punto de romper récords. Desde el 1 de octubre, la propuesta de financiación temporal del Senado no ha pasado, y parece que superará el récord histórico de 35 días de 2018.
¿Los más afectados? Los trabajadores de primera línea y los viajeros comunes. 13,000 controladores de tráfico aéreo y casi 50,000 personal de seguridad continúan en servicio sin salario, con una tasa de ausentismo que en un momento llegó a estar entre el 24% y el 44%. Los datos del 30 de octubre son aún más exagerados: más de 6,000 vuelos retrasados, más de 1,000 cancelaciones directas, y el aeropuerto JFK llegó a suspender operaciones. Algunos describen ahora la reserva de boletos de avión como una lotería: solo se sabe si se puede volar al llegar a la terminal.
La raíz del estancamiento sigue siendo el viejo problema: la falta de acuerdo en la asignación del presupuesto. Cada vez que se enfrenta a esta situación, ambas partes se niegan a ceder en sus intereses fundamentales. La industria del transporte aéreo es la más afectada, con pérdidas económicas diarias que superan fácilmente los diez millones de dólares; además, el sentimiento del mercado también fluctúa, y algunas instituciones prevén que la volatilidad de los sectores relacionados podría aumentar en 3 puntos porcentuales.
El mercado ahora está observando tres variables: ¿cuándo aparecerá la ventana de compromiso? ¿Cuánto tiempo durará el ciclo de estancamiento? ¿Qué tan fuerte será el impacto en la economía real? A partir de la situación actual, ambas partes tienen posiciones bastante rígidas, y con la presión de varios grupos de interés detrás, es difícil ver un cambio en el corto plazo.
Al final, quienes pagan el precio de este estancamiento político son las personas comunes: los controladores aéreos que trabajan sin salario, los viajeros cuyas itinerarios se arruinan y las empresas que enfrentan obstáculos operativos. El juego político en sí no tiene nada de malo, pero usar los servicios públicos como moneda de cambio en las negociaciones tiene un precio demasiado alto.
¿Cuándo se podrá resolver? Solo hay que esperar a ver quién de las dos partes no puede soportar la presión primero. Para los políticos, romper récords puede ser solo un número, pero para la gente común es una verdadera molestia en la vida. $BTC $ETH
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SeasonedInvestor
· 11-05 03:46
Perder dinero no es lo peor, lo más triste es que los trabajadores no tengan comida para comer.
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WalletManager
· 11-05 03:45
El coeficiente de riesgo se ha desviado gravemente del valor estándar.
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ProtocolRebel
· 11-05 03:37
Jugar a los juegos políticos, la gente común paga la cuenta.
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AirdropHunterWang
· 11-05 03:32
El boleto de avión se ha convertido en un rasca y gana.
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CryptoSurvivor
· 11-05 03:29
¿Estados Unidos todavía está jugando? ¿El juego del calamar, verdad?
#美联储降息 Recientemente vi un dato bastante impactante: el actual cierre del gobierno en Estados Unidos está a punto de romper récords. Desde el 1 de octubre, la propuesta de financiación temporal del Senado no ha pasado, y parece que superará el récord histórico de 35 días de 2018.
¿Los más afectados? Los trabajadores de primera línea y los viajeros comunes. 13,000 controladores de tráfico aéreo y casi 50,000 personal de seguridad continúan en servicio sin salario, con una tasa de ausentismo que en un momento llegó a estar entre el 24% y el 44%. Los datos del 30 de octubre son aún más exagerados: más de 6,000 vuelos retrasados, más de 1,000 cancelaciones directas, y el aeropuerto JFK llegó a suspender operaciones. Algunos describen ahora la reserva de boletos de avión como una lotería: solo se sabe si se puede volar al llegar a la terminal.
La raíz del estancamiento sigue siendo el viejo problema: la falta de acuerdo en la asignación del presupuesto. Cada vez que se enfrenta a esta situación, ambas partes se niegan a ceder en sus intereses fundamentales. La industria del transporte aéreo es la más afectada, con pérdidas económicas diarias que superan fácilmente los diez millones de dólares; además, el sentimiento del mercado también fluctúa, y algunas instituciones prevén que la volatilidad de los sectores relacionados podría aumentar en 3 puntos porcentuales.
El mercado ahora está observando tres variables: ¿cuándo aparecerá la ventana de compromiso? ¿Cuánto tiempo durará el ciclo de estancamiento? ¿Qué tan fuerte será el impacto en la economía real? A partir de la situación actual, ambas partes tienen posiciones bastante rígidas, y con la presión de varios grupos de interés detrás, es difícil ver un cambio en el corto plazo.
Al final, quienes pagan el precio de este estancamiento político son las personas comunes: los controladores aéreos que trabajan sin salario, los viajeros cuyas itinerarios se arruinan y las empresas que enfrentan obstáculos operativos. El juego político en sí no tiene nada de malo, pero usar los servicios públicos como moneda de cambio en las negociaciones tiene un precio demasiado alto.
¿Cuándo se podrá resolver? Solo hay que esperar a ver quién de las dos partes no puede soportar la presión primero. Para los políticos, romper récords puede ser solo un número, pero para la gente común es una verdadera molestia en la vida. $BTC $ETH