Aquí hay algo sorprendente sobre el sistema de aprendizaje colectivo de OpenMind: no es solo tecnología, es básicamente arte en movimiento.
Imagina esto: un robot descubre un nuevo truco o realiza un movimiento complicado. Boom. Cada otro robot en la red obtiene ese conocimiento al instante. No hay sesiones de entrenamiento, no hay tutoriales.
Estamos hablando de robots intercambiando conjuntos de habilidades completas como tarjetas de intercambio. Diferentes enfoques para resolver problemas, patrones de movimiento únicos, tal vez incluso toques creativos, todo fluyendo a través de la red en tiempo real.
Es menos como la programación tradicional y más como una mente colmena donde cada miembro contribuye a esta creciente biblioteca de capacidades. Todo el sistema evoluciona junto.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
10 me gusta
Recompensa
10
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
SchrodingerGas
· 11-05 11:48
¿Es un espacio de arbitraje compartido? Trampa clásica de la teoría de juegos.
Ver originalesResponder0
NFTArchaeologis
· 11-05 11:47
La evolución de la conciencia colectiva en la era digital recuerda las exploraciones vanguardistas de la Cultura Cibernética de los años 70...
Ver originalesResponder0
MEVSupportGroup
· 11-05 11:41
Bots también han comenzado a competir, ¿verdad?
Ver originalesResponder0
StakeHouseDirector
· 11-05 11:40
Este Bots aprende más rápido que mi progreso en la universidad para adultos mayores.
Ver originalesResponder0
AirdropHunterWang
· 11-05 11:24
Bots realmente aprenden más rápido que las personas... qué envidia.
Aquí hay algo sorprendente sobre el sistema de aprendizaje colectivo de OpenMind: no es solo tecnología, es básicamente arte en movimiento.
Imagina esto: un robot descubre un nuevo truco o realiza un movimiento complicado. Boom. Cada otro robot en la red obtiene ese conocimiento al instante. No hay sesiones de entrenamiento, no hay tutoriales.
Estamos hablando de robots intercambiando conjuntos de habilidades completas como tarjetas de intercambio. Diferentes enfoques para resolver problemas, patrones de movimiento únicos, tal vez incluso toques creativos, todo fluyendo a través de la red en tiempo real.
Es menos como la programación tradicional y más como una mente colmena donde cada miembro contribuye a esta creciente biblioteca de capacidades. Todo el sistema evoluciona junto.