El 22 de enero, Anthony DOnofrio, miembro fundador de ETH, publicó un artículo de opinión en CoinDesk titulado ‘La Fundación ETH ha perdido el rumbo’. El artículo insta a la Fundación ETH a realizar cambios en su liderazgo. Él afirma: ‘Para asegurar su futuro, la Fundación ETH debe pasar de ser una organización pasiva a ser un impulsor activo de la visión’. DOnofrio señala que la Fundación ETH es una entidad contradictoria; aunque se compromete con la descentralización, su forma de operar es centralizada, con directores, departamento financiero, desarrolladores remunerados y un círculo central; estas estructuras, aunque necesarias para la coordinación, entran en conflicto con la idea de descentralización de ETH.
Señaló que la Fundación ETH no solo necesita investigación tecnológica y reuniones de coordinación en esta forma actual, sino también una visión de liderazgo que comprenda no solo la tecnología sino también su amplio impacto social, filosófico y político. Este líder debe inspirar a una nueva generación de constructores a vincular la tecnología con las necesidades humanas y abordar un entorno político complejo sin comprometer los principios de ETH.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
El miembro fundador de Ethereum, Anthony D'Onofrio, hizo un llamado a la fundación Ethereum para un cambio de liderazgo en la alta dirección.
El 22 de enero, Anthony DOnofrio, miembro fundador de ETH, publicó un artículo de opinión en CoinDesk titulado ‘La Fundación ETH ha perdido el rumbo’. El artículo insta a la Fundación ETH a realizar cambios en su liderazgo. Él afirma: ‘Para asegurar su futuro, la Fundación ETH debe pasar de ser una organización pasiva a ser un impulsor activo de la visión’. DOnofrio señala que la Fundación ETH es una entidad contradictoria; aunque se compromete con la descentralización, su forma de operar es centralizada, con directores, departamento financiero, desarrolladores remunerados y un círculo central; estas estructuras, aunque necesarias para la coordinación, entran en conflicto con la idea de descentralización de ETH. Señaló que la Fundación ETH no solo necesita investigación tecnológica y reuniones de coordinación en esta forma actual, sino también una visión de liderazgo que comprenda no solo la tecnología sino también su amplio impacto social, filosófico y político. Este líder debe inspirar a una nueva generación de constructores a vincular la tecnología con las necesidades humanas y abordar un entorno político complejo sin comprometer los principios de ETH.